Sunday, January 27, 2013

Allá a lo lejos


Allá a lo lejos esta la ciudad. Que tranquila se ve desde este punto ya dentro del bosque. Estamos a unos 2,000 msnm, el aire es fresco, con jirones fríos que se cuelan entre los arboles. Ese frío que se siente mientras tomamos un respiro luego de alguna buena trepada en esta ruta “sencilla”. Aquí arriba colisiona alguna corriente tempranera que viene del oriente, impulsada por el calor del solecito que ya despunta mas allá… por el cerro de la Reina en Tonalá y el frescor matutino que exhala el propio bosque después de una fría noche. El resultado son estos jirones que ya les comentaba, rachas de viento que se cuelan por las mangas del jersey, o entre los cristales de mis lentes y el buff que me cubre la boca y la nariz. Pero no es una sensación incomoda, ni mucho menos, es el sentir de la vida, de estiramiento del espíritu y un jaloncillo de la misma mañana para continuar la rodada.
Así es como enderezamos las bicicletas, oteamos otra vez a la ciudad que ya se va despertando y que nos regala una vista algo hipócrita… jeje, ¿Por qué? Porque no deja ver la nata de contaminación que ya la empieza a envolver y que se ha convertido en una incomoda compañera para la mayoría y muy peligrosa para no pocas personas. Aquí en la toma, poniendo atención se ven los “pivotitos” que son los edificios que con arrogancia buscan sobresalir de la mancha urbana y se convierten en esa especie de animales que se estiran lo mas posible para asomar sus narices por encima del vaho toxico y el ruido ensordecedor de su desordenado y disparejo crecimiento y absorber algo de aire puro y la tranquilidad de antaño.

Y así retomamos ruta de nuevo, queda el regreso que, luego de haber pagado el esfuerzo de las trepadas, de los escalones rocosos del sudor que se va enfriando en la mañana dentro del bosque nos arrebata la respiración y una que otra caloría, ahora vamos hacia abajo, surcando entre los arboles y trastabillando con alguna raíz o piedra bien acomodada (pareciera que de noche, gnomos o duendes salieran de sus escondrijos para colocar obstáculos en el centímetro exacto para que nuestras ruedas se encuentren con ellas en el momento justo).
Así y con todo y los encuentros cercanos con las ramas, resbalones inoportunos y acercamientos a las paredes que bordean algunos de los tramos del regreso, aun con eso, regresamos completos y con mínimos rasguños, aunque eso si, recargados de energía para iniciar un nuevo día en esta, no tan gran ciudad!

Ro

Monday, January 21, 2013

Rodando por Atemajac de Brizuela


reseñando la Perrona 2013 -

Y continuamos…  para generar sinergia con el 2013, estuvo perfecto que hubiera caído en 13 de enero el rodar estar ruta… Íbamos un buen numero de ciclistas: Rommel, Marcos, Roberto B., Pepe (con la consigna de no perderse), Betsy, Charly, Liz, Ro, los nuevos de la jornada: Griselda y Samuel y los que iban llegando ese mismo domingo, Roberto de Alba, Víctor  Ivan y varios colegas de Tequila Bike como el Abogangster, el Pirru y el Sabas que llevaba a su propio clan para bautizarlos con el fuego de esta hermosa, pero demandante rodada…
Conforme vamos pedaleando, sorteando las colinas que nos elevan sobre pequeños valles, la sierra nos va regalando paisajes sin igual. Y en esta ocasión, Eolo nos estuvo acompañando. Fue jugando al pintor caprichoso coloreando el cielo sobre nuestras cabezas con jirones y nos brindaba un fresco frío que al menos a mi me exhorto a irme a “Sub”, con mi pasamontañas armado con mi buff… rodando sobre esta tierra generosa y extasiado con las vistas. Y aderezando los momentos con las pláticas, con mi sarta de anécdotas y consejos que a veces, sin que sean pedidos, yo comparto, jeje.






















En fin, fuimos al mirador, un rincón gratuito (y espero que así siga) para aquellos que nos esforzamos por buscar estos rincones mágicos de nuestro planeta y luego de disfrutar de sus vistas, de la platica y el típico mini-desayuno, partimos de regreso, ahora hacia el rancho de san Francisco, para luego trepar a la piedra balanceada y luego disfrutar el inigualable single-trak que nos llevo a Juanacatlán, cuyo nombre habría de significar, lugar del viento frío en la planicie… 








Ya de este punto, nos sumergimos de nuevo en los bosques de la sierra para llegar al pequeño, pero entrañable pueblo de Ferrerías de Tula y su fotogénica presita. Luego de aquí, apuntamos nuestras rilas hacia la meta, nuevamente el pueblo de Atemajac de Brizuela… sorteando los últimos columpios, que tanto trabajo le costaron a unos, y cruzando el arroyo, que invito a una parada no programada al buen Vic, que pasando lo difícil, tuvo que pagar el costo del “desengrape tardío” y visito la pedregosa superficie a orillas del arroyo, sin consecuencias afortunadamente… pero con una lección mas de como desengraparse, ¿no es así Vic?

Al final, todos llegamos, Pepe no se perdió!, los nuevos ya no son tan novatos luego de haber rodado esta ruta, y este veterano, se volvió a sentir como cuando empezaba a rodar, agradecido con la vida por esta oportunidad, con el planeta por regalarnos aun toda esta belleza, con los amigos y colegas que le dan este gran sabor a rodar y rodar disfrutando la ruta y a los míos que se quedaron en casa esperándome, para poder compartir con ellos lo bello que es esto de la bici en la montaña.


Nos vemos en la próxima... Ro




Sunday, January 20, 2013

La magia de rodar

Arrancando la Perrona 2013 -

Hola,
Se llegó la fecha y nos lanzamos al reto que se esta volviendo un clásico para iniciar el año. La rodada ideal para cerrar la época de “baja” actividad física, bueno, a excepción del estomago, que es lo que mas utilizamos desde final de diciembre hasta la rosca de reyes.

Esta rodada es el arranque  de motores no solo de cada uno de nosotros sino del grupo, es iniciar las reuniones para logística, las platicas de pasillo, los chats y los hilos de discusión de correo electrónico. 
La emoción nos va llegando de a poco, hasta que iniciamos a disfrutar de la jornada previa, cuando algunos nos vamos al pueblo de Atemajac de Brizuela para compartir una rica cena en el mercado... unos van por los tamales, otros por los sopes, alguno encuentra las flautas o el pozole y no falta quien visite varios de los puestos y arme su buffet personal! De tomar tenemos el clásico refresco, o un tradicional y exquisito atole que sabe a gloria en el frío. De ahí pasamos a comprar fruta, pan dulce y demás provisiones para el desayuno...

Luego viene terminar el día disfrutando con los compañeros de aventura comentando los previos, con una tertulia nocturna cobijados al calor de la chimenea y el sabor del ponche de granada, hasta que vamos cayendo en manos de Morfeo, unos antes, otros después.








Al amanecer, el primer reto es poder dejar las cobijas y enfrentar el frío serrano. Cada quien va realizando su propio ritual; tomar un vaso de agua, pasar el baño, prepararse un café, un vaso de leche, comer una fruta, aceitar la bicicleta, decirle cosas bonitas a su alumínica… y así  vamos encaminándonos al arranque… la jornada a empezado…




Tuesday, January 15, 2013

Poniendome al corriente


Aprovecho haber terminado los pendientes del día (y de días anteriores), para crear este otro post y arrancar con todo el blog en este 2013. Finalmente empecé a darle más “carrilla” a mi bici (la Green), y esta se ha portado a la altura. Promete la alumínica, me aguanta y me sigue el ritmo y yo empiezo a conocerla más para saber como le gusta ser rodada… y así no darnos al traste ambos… jeje.


Rodando por nuestro bosque el otro día, me detuve unos segundos en varios puntos de la rodada que hacíamos el Rober y yo… fueron algunos puntos en los que generalmente nos detenemos pero lo mágico fue encontrar tomas que aunque son similares a otras ocasiones, tienen su propio sabor. Por pocos metros antes o después que uno se detenga, el entorno es completamente otro.



Es genial toparse con colegas ciclistas que aguantan el frío y se lanzan a la rodada matutina de un viernes. Para escapar por un par de horas de la rumiante ciudad. En esta ocasión, nos detuvimos unos metros adelante y pude tomar la foto que dejo abajo, de la lejana y a la vez, cercana ciudad. Esto fue porque había una pareja de jóvenes por ahí también tomando algo de aire antes de continuar su propia aventura…

Buen dia


¡Buen día!
Es la frase que me encanta para empezar cada mañana. Y es un aliciente para sonreír mientras inicio las actividades, sea a pie, sea en bicicleta, vaya a mi trabajo, por mi café o a rodar a la montana. Creo que es la primera cosa que promovería para que el mundo cambiara…

Poder decir “buen día” al menos 10 veces durante los primero 60 minutos del día podrían hacer mucho mas que una ley de buen gobierno o el que esperemos a que los diputados recobren el sentido común al hacer lo que dizque es su trabajo… je je, pero bueno…

La verdad, “buen día” es una bendición, es buena vibra, es un buen deseo. Y lo que es mejor, es un boomerang… sin importar si a quien se lo dices te lo responde, de hecho si no se recibe, igual te regresa… y si te lo responden, ¡te regresa doble! ¿Que mejor no?

Hace unos días salí a rodar y todas estas frases que acabo de plasmar me fueron llegando, o yo las fui alcanzando. Prueba, de nuevo, de que rodar te pueda dar mucho más de lo que uno cree. No es solamente una bondad física. También te hace ejercitar el espíritu, la mente, te relaja y eso hace que descubras pequeñas, grandes verdades que no cuestan tanto y aportan mucho al cotidiano andar.

Y aparte de todo, la misma rodada, generalmente se enmarca con tomas como las que con mucho gusto les comparto aquí:

Una vista del poniente de la ciudad, el cerro mas a la derecha es el cerro del Colli. No hablare de lo impresionante que se ve a la voraz ciudad que amenaza al hermoso Bosque la Primavera, sera tema para otro post...

O aquí podemos ver una toma mas de la enorme mancha urbana de Guadalajara, aun con el amanecer, y un día en que el bondadoso viento nocturno nos minimizo la contaminación matutina.



Con estas tomas, es difícil no bajar de la montaña y decir a aquel con el que me cruzo en el camino: "Buen día!"

Ro